Como no obstante hemos mencionado, una de las diferencias más obvias entre la sal kosher y otras sales, como la cloruro sódico de mar, es que esta no tiene aditivos químicos y mucho menos se les agrega yodo. Otro punto es que siempre es de un grano corpulento.Encima, su textura gruesa hace que se requiera menos cantidad para sazonar los alimento